Conocer a José Carrascosa supuso entender mucho mejor la vertiente emocional. Cambió mi forma de relacionarme con la máxima exigencia. Aprendí a disfrutar en el deporte profesional, sin desgaste, sin sufrimiento, a vencer tus propias barreras y superar tus límites, a lograr un rendimiento estable. Pero lo más valioso para mi ha sido poder transferir todo lo aprendido a mi propia vida para construir mi propio bienestar. Para mi, más importante que ganar es mejorar cada día en tu preparación, aceptar el reto de la vida, esforzarme con honor y nunca rendirme. Gracias José por ayudarme a canalizar toda mi energía en ser mejor futbolista y mejor persona. Cuando te sientes preparado no hay nada que temer.